Gestionar el correo electrónico con menores ineficiencias

¿qué herramienta ha evolucionado menos desde que conocemos Internet? Para mi claramente el mail, perdemos muchísimo tiempo cada día… ¿O tu no lo pierdes?

Y por eso, y porque me organizo relativamente bien con gmail, preparé hace mucho una presentación mala sobre trucos varios de cómo gestionar mejor el correo electrónico. La presentación la usaba para compartirla con el equipo de coches y para que fuéramos todos más eficientes. Time is money.

Hoy la comparto, sin más intención que echarte una mano si usas Gmail, Chrome, etc. Seguro que hay muchas cosas que se pueden complementar ¿me sugieres más trucos?

Correr con un motivo

Corro desde mucho antes que al correr le llamaran running. Mucho antes que las crisis de los cuarenta llenara de «marathoners» y «iron men» las calles de nuestras ciudades…

No en vano mi primer maratón lo hice en 1997 con 21 años. Cosas que tenía uno, éramos deportistas y lo hicimos. Porque si. Sin vaselina y sin moda. Con unas zapatillas reguleras, sin reloj de correr, con dos pelotas.

Y ahora que ha pasado el tiempo y ahora que «está de moda» todos los que no corren te preguntan por qué, queriendo entender qué hay detrás. Por qué ellos no y tu si.

Al correr creo que no hay que buscarle muchas vueltas. Es fácil, te gusta o no te gusta, sin más. Si te gusta corres mucho, si no lo dejas. Y eso no quita que en cada inicio de cada maratón uno piense lo de «¿Qué coño hago yo aquí?» pero que quede contrarrestado en el final, con un «¿Cuándo es el siguiente»?. No quita que duela pero quieras más, no quita que cada vez que te levantas a las seis de la mañana, cuando es de noche en Madrid te tengas que acordar de Rise and Shine, ese pedazo vídeo que me sigue poniendo la piel de gallina.

Y no es que quiera responder a esos que te preguntan por qué cuando no se puede. Pero estos días tengo un motivo adicional para correr, para tratar de hacer un reto distinto. La Intermón Trailwalker del próximo cinco de julio. 100 kilómetros duretes por la Sierra de Madrid, en equipo y con un máximo de 32 horas de camino que deberemos completar los cuatro integrantes del equipo a la vez.

100 km de montaña trailwalker Madrid

Puestos a responder por qué correr esta carrera fue, también, porque si. Vi la primera Trailwalker, la que ya se había hecho en Girona y me pareció muy chula. Correr para recaudar dinero para proyectos de Intermón, aglutinando un mínimo de 1.500 euros y hacerlo en compañía de gente que te quisiera acompañar, amigos, compañeros de trabajo, socios, familiares, alguien… Alguien porque al principio me costó encontrar gente. En la ofi de coches me decían que estoy loco y por mucho que preguntara a mi alrededor no era fácil.

Hasta que di con mi equipazo, hasta que me dijeron que si Sergio, Ricardo y Eloy. Socio, amigo de socio y primo, una mezcla rara pero perfecta, alineada a tope para disfrutar en el camino y para de paso tener y poder dar un motivo. Recaudar dinero para proyectos como estos.

Con lo que lo dicho. Ya tengo un motivo más y claro, estas líneas son también para animarte a si quieres, que aportes a esos proyectos. Que apoyes desde este link a nuestro equipo. Cuanto más dinero mejor, correremos más felices, con más motivos.

Cosas que hago… El Aló Presidente de @coches

Fruta y coches.com

No soy el mejor fundador ni el mejor CEO, ni ejemplo en casi nada pero a veces uso estas líneas, que son mías, para contar cosas que hago. Por si ayudan.

En las empresas a veces falta comunicación. Pequeñas, medianas y grandes, da igual el tamaño. Y no tiene por qué ser por opacidad sino que muchas veces la velocidad hace que no se cuente todo lo que se debería contar, o al menos lo que el empleado querría escuchar. Números de la empresa, objetivos, por qué se hacen unas cosas y otras no…

Y eso trato de solucionarlo una vez al mes con lo que llamo Aló Presidente, programa del que seguro que alguna vez escuchaste por las cosas curiosas que pasaban en él.

¿Y qué es el «Aló Presidente» en coches?

Fácil: Primer miércoles del mes, diez de la mañana. Aquí el Subcomandante Arrola se invita a desayunar en la oficina, ordenador abierto, una hora y media para que quien quiera de la oficina venga a hablar de lo que quiera, de negocio o incluso de mí personalmente, de política, de fútbol, de… Y cuando digo hablar de lo que quiera es dando todos los datos que sean necesarios de la empresa, trasparencia total.

Al principio miedos, dudas, qué voy a decirle al jefe. Pero lo normal es un desayuno trasparente en el que viene gente aunque sea a hacer la broma de «yo solo vengo a comer». Y queda ponerte a disposición de lo que surja en cada momento con todos los que se acercan.

Ah! Hoy hay fruta que ya vale de tanto bollo!

Coches eléctricos si, pero…

Perfil lateral del coche eléctrico Think City

Este pasado fin de semana he tenido la suerte que me dejaran un coche eléctrico. Cierto es que ya hace tiempo que existen y que quizá trabajando en coches.com tendría que haber tenido la oportunidad antes pero oye, es lo que hay. Aunque uno sea el que manda en la empresa me pasan cosas siempre raras en cuanto a primicias y usos de coches que uno parece que debería tener. Creo que ya he comentado que voy andando al trabajo, que no he tenido coche propio durante mucho tiempo y que he vivido de prestado tanto de unos familiares como de compañías de renting, concesionarios, etc. Por cierto, ya tengo coche propio pero eso lo contaré otro día que como decía al principio hoy esto va de coches eléctricos.

La oportunidad me la ha dado Jorge Bautista, CEO de ING Car Lease, con el cual tuve la suerte de comer hace unos días. Al salir me dijo que si me apetecía y le dije que claro, que aún no había probado ninguno y que estaría encantado. De Jorge no tengo más que cosas buenas que contar pero quizá eso sera para otro día. El proyecto de ING Car Lease en general y el de Driveon en particular me parecen absolutamente punteros en un sector del motor que en España necesita gente grande haciendo cosas distintas y por supuesto buenas. Y si no podía hablar más que bien de ellos encima todo fueron amabilidades llevándome incluso el coche a la oficina.

El modelo eléctrico en si era un Think City de dos plazas y amplio, para el tamaño del coche, maletero… ¿y ahora como sigo? ¿Cómo se escribe un post de estos de pruebas de coches? Otro cliché roto, no sé la estructura, la haré al tun tun, a ver cómo sale…

La impresión inicial del coche es la que tienes cuando usas un coche pequeño, que es como de juguete. Te cuentan que sale «fuerte» al arrancar y te hace gracia pero es verdad, no es que sea un Porsche o un Maserati pero oye, no sale como la pinta que tiene el coche. Es muy curioso el concepto de arrancar porque como el coche no suena no te das cuenta más que por un piloto de cuando está arrancado y cuando no. Te dicen que tengas cuidado que la gente no te ve y también es cierto, por el tamaño del coche en si y porque lo dicho antes, no suena nada, casi nada.

¿Al conducirlo? Cuando lo conduces por ciudad sin problemas, manejable, suelto y sin problemas. Me quedó la duda de si es un coche que en ciudades como Madrid se puede aparcar o no sin pagar el famoso papelito verde. Cuando ya te vas fuera pues vaya, limitado como es comprensible. Y es que eso era lo malo, que estoy viviendo fuera de Madrid y tenía que llevármelo fuera si o si, en concreto a unos setenta kilómetros y cuesta arriba. El coche me lo dieron al setenta por cierto de su carga y me aventuré a pensar que lo que dice su site es correcto y que si se supone que tiene una autonomía de 203 kilómetros pues me que tenía más que de sobra para llegar a mi destino. No me equivoqué pero las pasé canutas. Canutas porque al llegar a Las Rozas tenía el cincuenta por ciento de carga y aún tenía que subir el puerto de Galapagar y la Cruz Verde que no son el Mortirolo ni el Aubisque pero quien sabe, en ese momento había que dar soluciones. ¿cuáles? Punto muerto en las pocas cuestas abajo, nada de aire acondicionado, ventanas abiertas, punta de gas y mucha calma. Un viaje que repito bastantes veces y que tardas entre cincuenta y setenta minutos según velocidad y tráfico y que creo que nunca he hecho tan lento. Me hacía gracia porque todo el mundo me miraba mal, pensando que claro, que los coches eléctricos deben ir despacio, que quien es el tonto del coche naranja, etc. Llegué por debajo del quince por ciento de carga, pero llegué, y lo primero que hice fue eso, recargarlo. ¿cómo? Pues se recarga con un enchufe de los de toda la vida que tienes en el maletero y que por un módico precio de la electricidad te permite hacer los supuestos 203 kilómetros de nuevo. El proceso de carga es tremendamente sencillo aunque cierto es que tarda lo que en este modelo de coche te hace pensar si es la solución, no es como repostar un coche de gasolina en el que en un momento puedes volver a devorar kilómetros.  Unos días después la vuelta a Madrid fue más fácil, era cuesta abajo y empezaba en el cien por cien de batería, de hecho llegué por encima del cincuenta por ciento, eso si, hice un poco de todo de lo comentado pensando en que si se lo tenían que llevar de vuelta no quería que se quedaran colgados.

¿Conclusión? Pues que aunque el coche es una chulada y como concepto terminará siendo la alternativa hay mucho que desarrollar en tamaño de coches, autonomía y recarga, Creo que por ahora no es la solución a nada y queda mucho mucho por recorrer, por mucho que nos quieran vender la moto de la ecología, del menor consumo y demás. Para mi no es solución un coche con una limitada autonomía, pequeño y que cuando lo recargas tardas un rato. ¡y además cuesta un dinerete! Si que sería un tercer coche que podría tener en casa pero no soy de esos ni creo que esté el patio para terceros e incluso para segundos coches.

¿Y a ti? ¿Qué te parece? ¿Has conducido alguno ya? ¿Te comprarías uno?

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Sobre la relatividad del dinero

¿Alguna vez te has parado a pensar cuánta gente hay por encima de ti en poder adquisitivo y cuanta por debajo? El número en si da un poco igual pero pensarlo es bueno porque te hace relativizar eso por lo que todo el mundo pelea: por el dinero.

Y es que el dinero es algo tan relativo que cada día estás en un sitio distinto. Tengas el dinero que tengas siempre habrá alguien que tenga más, siempre habrá alguien que te adelante, al que adelantes. Tener dinero es como correr, corras lo que corras, entrenes lo que entrenes al final siempre habrá alguien que te gane, un etíope, un keniata, siempre alguien delante…

Hoy me acordaba de la anécdota que un familiar me contó sobre un famoso empresario español, quizá de las mayores fortunas de España, que sirve para darte cuenta que niveles hay para todos y que esto se refleja hasta en las pequeñas cosas.

En un viaje de trabajo estaban los dos haciendo tiempo en el aeropuerto para coger un vuelo que les devolvía a Madrid cuando la famosa fortuna se acordó de que tenía que hacer un regalo al Rey Juan Carlos que en unos días era su cumpleaños. Mi familiar le dijo ¿y por qué no miramos en el duty free que seguro que algo encontramos? Obviamente el Rey es alguien difícil al que regalar y cuando faltaban las ideas y pasaban por Loewe mi familiar le dijo al empresario: – ¿Y por qué no le regalas este llavero que es precioso y siempre es útil? – El empresario se paró y le dijo, sin ningún afán de superioridad: – Es bonito si, pero es que, nosotros no usamos llaves… –

Y es que hasta en eso hay diferencias, hasta en si llevas o no llevas llaves, si te abren las puertas, si te llevan en coche, si siempre hay alguien que te espera para todo lo que puedas necesitar.

Y ya que es tan claro, ya que hay que relativizar los asuntos de dinero ¿Por qué no te preocupas de lo importante? ¿Por qué siempre el dinero?